En la noche del martes, cientos de combatientes del grupo terrorista Boko Haram atacaron un puesto militar en el sur de Níger. El combate se dio en la región de Diffa, al sur oriente del país, y 16 soldados murieron, nueve más fueron heridos y 50 atacantes del grupo fallecieron en el combate.

El ataque tuvo como objetivo la ciudad de Baroua, en Diffa, donde miles de ciudadanos acababan de regresar a sus hogares tras una serie de masacres perpetradas por Boko Haram en 2015. La región de Diffa alberga aproximadamente a 300.000 refugiados nigerianos.

Días antes del ataque, más de 6.000 personas habían regresado a la región dentro de un programa de la ONU que busca retornar al territorio a más de 26.000 civiles.

En la actualidad, el sureste del país está siendo atacado por Boko Haram y su grupo disidente, la Provincia del Estado Islámico de África Occidental (ISWAP). El oeste de Níger también está luchando contra grupos armados de Malí, que incluyen a seguidores del Estado Islámico en el Gran Sahara (ISGS).