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El club Mar-a-Lago del presidente Donald Trump se reabrirá parcialmente a los miembros este fin de semana a medida que el sur de la Florida reabre lentamente desde el bloqueo del coronavirus.
El restaurante Beach Club del resort de Palm Beach, su piscina y su hidromasaje volverán a abrir el sábado después de estar cerrado dos meses, pero su edificio principal que incluye habitaciones de hotel, el comedor principal y la residencia privada del presidente permanecerán cerrados. Los miembros deberán practicar el distanciamiento social, tendrán que llevar su propia toalla y las sillas de piscina se colocarán a 6 pies (2 metros) de distancia.
Los ejecutivos de Mar-a-Lago dijeron a los funcionarios de Florida el mes pasado que despedían temporalmente a 153 trabajadores debido al cierre.
El proyecto de ley de alivio económico del gobierno federal prohíbe específicamente a las empresas de Trump, así como a aquellos que tienen vínculos con otros altos funcionarios del gobierno y miembros del Congreso y sus familias inmediatas, recibir préstamos de emergencia y otros beneficios destinados a ayudar a las empresas a retener a los trabajadores durante la pandemia.
A partir de 2018, los aproximadamente 500 miembros de Mar-a-Lago pagaron una cuota anual de $ 14,000 por el acceso a la propiedad, y los nuevos miembros pagaron una tarifa de iniciación de $ 200,000 que se duplicó después de las elecciones de Trump en 2016.
Trump compró Mar-a-Lago, de la fundación de la heredera de cereales Marjorie Merriweather Post en 1985 por $ 10 millones y ha invertido decenas de millones de dólares para mejorar la propiedad. Lo abrió como club en 1995.
