Después del anuncio de la empresa rusa Gazprom, suspendiendo el envío de gas a Polonia y Bulgaria, la Unión Europea envió el combustible a ambos países. El gigante energético ruso cortó el suministro de gas a estas naciones, que dependen del gas ruso, porque «no recibió el pago en rublos».
“Nos aseguraremos de que la decisión de Gazprom tenga el menor impacto posible en los consumidores europeos”, anunció la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Por su lado, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, dijo que “de forma conjunta y solidaria” los 27 países de la UE apoyarán a Polonia y Bulgaria tras el corte de suministros de gas. «Ya sabíamos que teníamos que disminuir esa dependencia del gas y del petróleo ruso y lo que Rusia hace ahora no es, ni más ni menos, que espolearnos para hacer eso más rápido todavía», anunció Borrell
Guerra en Ucrania, guerra por el gas
En marzo, Vladimir Putin anunció que solo aceptaría el pago por sus envíos en la moneda nacional, (rublos). La decisión fue tomada en respuesta a las sanciones tomadas para castigar la ofensiva del Kremlin en Ucrania.
Ante la acción rusa de corte de gas, Von der Leyen advirtió que ceder a las demandas del Kremlin y pagar en la divisa rusa sería contravenir las sanciones que han impuesto occidente. También explicó que “cerca del 97 %” de los contratos de la UE estipulan explícitamente su pago en euros o dólares.
Altos cargos afirmaron que los ministros de Energía de la Unión Europea se reunirían el próximo lunes para abordar la situación.
